13 Mar Mejora la calidad de vida
Cuando recibes una transfusión de sangre, recibes sangre por vía intravenosa (IV). Las transfusiones de sangre a veces son necesarias después de que una lesión o cirugía cause una gran cantidad de pérdida de sangre. Algunas personas necesitan transfusiones regulares debido a condiciones médicas como la hemofilia o el cáncer. Esto se llama terapia de transfusión.
La terapia transfusional consiste en el uso de varios componentes sanguíneos donados entre una y otra persona. Existen numerosos hemo-componentes, entre ellos los paquetes globulares o concentrados eritrocitarios, las plaquetas y algunos derivados del plasma. El hematólogo es el encargado de indicar y vigilar el uso adecuado de los hemo-componentes.
Transplante de médula ósea
El trasplante de médula ósea es una opción de tratamiento eficaz para varias enfermedades de la sangre, puede llevarse a cabo de manera autóloga, es decir, que el paciente es su propio donador, o de manera alogénica, cuando el donador es una persona ajena. El trasplante de médula ósea puede ser realizado utilizando la sangre periférica y no necesariamente requiere de una punción ósea.
En el Centro de Hematología tenemos amplia experiencia realizando este procedimiento incluso de forma ambulatoria.
Trasplante de células madre
El trasplante de células madre representa una manera muy útil para tratar una amplia gama de padecimientos, entre las que se incluyen algunos cánceres como la leucemia, de testículo o de ovario, el linfoma, el neuroblastoma y el tumor de Wilms, las hemopatías, las enfermedades del sistema inmunitario, entre otros.
Las células madre trasplantadas se introducen en el torrente sanguíneo por medio de una vía intravenosa, de forma muy parecida a las transfusiones de sangre. Una vez dentro del organismo, estas células pueden fabricar células sanguíneas y del sistema inmune, nuevas y sanas.